Ruth Canicio, licenciada en Química orgánica e Ingeniería Química por el IQS, siempre ha visto en el desarrollo tecnológico una de sus grandes pasiones. Hoy, 18 años después, es CEO de Hydrokemós, una compañía de base tecnológica que ha creado la primera tecnología capaz de eliminar los nitratos del agua contaminada sin generar ningún tipo de residuo.
La empresa, filial de Dr. Canicio Consulting Chemist y participada por el socio inversor, Abisum, trabaja para llevar al mercado su técnica de descontaminación ambiental, abastecer a toda la población de agua potable y remediar los vertidos de nitrato al medio ambiente, convirtiendo su tecnología en la mejor tecnología disponible en la eliminación de nitratos.
Ruth, háblanos de Hydrokemós, ¿cuándo y cómo surgió?
Hydrokemós nació en el año 2011 como una empresa de base tecnológica, con un objetivo muy claro, desarrollar una tecnología de desnitrificación de aguas subterráneas y aguas industriales. El proceso de eliminación de nitratos ya se había estado llevando a cabo previamente en la empresa madre de Hydrokemós, la compañía Dr. Canicio Consulting Chemist. Pero fue hace 5 años cuando se decidió crear junto al socio inversor, Abisum, una compañía específica para el desarrollo de esta tecnología. De esta manera empezamos a trabajar en el desarrollo, escalado y comercialización de la electrodesnitrificación.
¿Por qué equipo está formada actualmente la compañía?
Actualmente somos un equipo básico de 10 personas, de las cuales 6 están en plantilla y cuatro subcontratadas. Contamos con un técnico máster en Medio Ambiente, un jefe de campo, tres técnicos superiores de laboratorio, un técnico jefe de escalado, un ingeniero químico, y yo como CEO. Como tercera parte externalizada, un doctor ingeniero químico, el Prof. Dr. Canicio, que actúa como consejero científico y la directora financiera y administrativa, Mercè Campàs. Además, también forman parte del equipo dos expertos externos en programación de automatización y telecomunicaciones. Sin contar el grupo de expertos del pool de empresas subcontratadas que construyen los equipos.
¿Cuáles fueron los motivos que os llevaron a emprender este proyecto?
En primer lugar nos dimos cuenta que la contaminación del agua por nitrato es una problemática mundial y que había una petición de la sociedad muy importante para solucionarla.
Nos fijamos, por ejemplo, en el caso de Cataluña, donde la contaminación por nitratos del agua es un problema muy presente. La población está en constante crecimiento y eso significa que la demanda de agua dulce también lo está, creciendo un 1,5 % anualmente, y esta situación lleva a tener que utilizar los recursos del subsuelo. El problema es que el 30%-40% del agua subterránea está contaminada por nitratos, debido sobre todo a la agricultura intensiva. Por este motivo decidimos emprender y centrarnos en encontrar una tecnología que fuera capaz de encontrar una solución: las tecnologías existentes separan los nitratos, pero no los destruyen cerrando el ciclo de nitrógeno.
¿Cuál crees que es el valor diferencial de vuestra tecnología?
Hay muchas tecnologías en el mercado que separan los nitratos, la diferencia es que cuando realizan la separación generan una salmuera de nitrato y otros iones que provoca que solo se eliminen en un lugar puntual, sin poder resolver el problema inicial. Nuestra tecnología los destruye convirtiéndolos en nitrógeno y oxígeno, es decir, simplemente aire.
Nosotros solucionamos el problema sin generar ningún tipo de residuo, utilizando íntegramente el recurso del agua. Se trata de una conversión 100% de nitratos a nitrógeno, sin generar residuos y aprovechando el 100% el recurso agua. Cerramos así el ciclo del nitrógeno que el proceso Haber&Bosch desequilibró hace cien años.
¿Dónde realizáis el trabajo de investigación y el desarrollo de la maquinaria para llevar a cabo vuestra técnica?
El trabajo de investigación se realiza desde las instalaciones del IQS pero para el desarrollo de la maquinaria contamos con tres empresas subcontratadas, Industrial Carsan de Sant Vicenç de Torelló, que se encarga de la mecanización y la construcción; LG Sistemes, que trabaja en la automatización; y finalmente, Manuplast, que construye los holders. Decidimos hacerlo de esta manera porque creíamos que era necesario buscar partners para poder llevar a cabo el escalado industrial de la tecnología y construir plantas a nivel industrial.
Unos meses atrás recibisteis 1,35 millones de euros de la Comisión Europea por vuestro proyecto WATIFY, en el marco del Programa H2020. ¿Cómo creéis que os puede ayudar a crecer?
La subvención que recibimos fue de 923.000 euros y el proyecto era de 1.320.000 euros, la Comisión Europea subvencionó el 70%. Se trataba de una gran oportunidad para poder implementar todo lo que Hydrokemós tenía previsto hacer durante los siguientes años en un tiempo más reducido y sin la necesidad de buscar más financiación fuera.
¿En qué consiste el proyecto WATIFY?
El proyecto Watify se centra en la actividad principal que quiere llevar a cabo Hydrokemós durante los próximos dos años, se trata de la demostración de la eficacia de la tecnología a nivel industrial a través de aplicaciones reales. Para hacerlo, escogimos cuatros ámbitos de aplicación diferentes, es decir cuatro plantas industriales.
¿En qué ámbitos se aplicará vuestra tecnología?
El primer ámbito es la industria alimentaria. Se trata de una planta de 20 m3/día para descontaminar el agua de pozo contaminada por nitratos y poder subministrarla a la industria. En este caso debemos tener en cuenta que la industria alimentaria consume un 40% del agua potable total, por lo tanto, sería uno de los clientes más importantes, ya que nuestra tecnología le permitiría obtener el agua con un coste mucho más bajo del que se obtiene actualmente. Esta planta está construida e implantada en una alimentaria en Malla (Osona) y se pondrá en marcha este octubre.
La segunda planta quiere demostrar el efecto de la electrodesnitrificación sobre la remediación del agua fuertemente contaminada procedente de la industria metalúrgica, un ámbito en el que creemos que nuestra tecnología puede ser muy válida. Esta se implementará en una industria metalúrgica, donde está previsto realizar una eliminación de 12 quilos de nitratos al día. La tercera es una planta de abastecimiento municipal ubicada en Borrassà. La primera del mundo en dotar a un pueblo de agua potable por electrodesnitrificación.
Finalmente, la última iría dirigida a reducir el contenido de nitratos concentrados en lagos, estanques y fuentes o al saneamiento de la contaminación producida por el tratamiento por ósmosis de aguas saladas o salobres.
Recientemente aplicasteis esta misma tecnología de desnitrificación para potabilizar el agua en el municipio de Borrasà a través de un acuerdo con el Organismo Autónomo de Salud Pública de la Diputación de Gerona, DipSalut. ¿Cómo fue el proceso y los resultados?
Dipsalut nos dio la oportunidad de probar la tecnología por primera vez en campo. Tuvimos el prototipo de cinco m3/día trabajando en el municipio durante seis meses y tres veces a la semana venía el Institut Català de Recerca de l’Aigua para coger contra muestras y validar la calidad del agua. Los resultados han sido muy positivos y nos han permitido validar la tecnología internamente en cuanto a costes y calidad.
Por este motivo, actualmente se ha elegido Borrassà para construir una planta industrial también dentro del marco del programa europeo. Está será de 100 metros cúbicos día y abastecerá de agua potable a la población, que hasta el momento consumían agua del depósito contaminada por nitratos.
¿Habéis aplicado vuestra tecnología en otros municipios?
Sí, actualmente estamos probando nuestra técnica en Caldes de Malavella con un prototipo de 5 m3/día y está previsto llevarla a Navata. Estamos interesados en aplicarla en diferentes lugares para poder ajustar todos los parámetros necesarios según la calidad del agua. Conjuntamente con compañías suministradoras, como Aigües Vic o Prodaisa, exploramos el mercado de municipios sin suficiente abastecimiento de agua potable debido a los pozos contaminados por nitratos.
¿Cuál fue el proceso que siguió Hydrokemós para empezar a probar vuestra tecnología en distintos ámbitos y municipios?
En el 2014 cuando se dispuso del primer prototipo piloto, Dipsalut vino a buscarnos y nos propuso un ensayo facilitando datos del diversos municipios de Girona. De esta manera pudimos empezar a trabajar y rediseñar nuestros prototipos. La Agencia Catalana del Agua también colaboró con nosotros ofreciéndonos nuevos datos que nos han servido para detectar nuevas problemáticas en otras poblaciones.
¿Qué sectores pueden estar más beneficiados por la actividad de Hydrokemós?
Creemos que el sector alimentario puede ser uno de los grandes beneficiados, también el ámbito industrial, las administraciones y las empresas de distribución del agua. Nuestra intención es seguir demostrando que tanto a nivel económico como sanitario, vale la pena extraer el agua del subsuelo y aprovecharla.
¿Cuál crees que es la importancia de la propiedad intelectual en un proyecto como el vuestro?
Creo que la propiedad intelectual es imprescindible para proteger un proyecto, hay mucho esfuerzo e inversión realizada para poder desarrollarlo y no podemos arriesgarnos a que copien la tecnología. En su día nosotros creamos una patente española y posteriormente, tras aplicar nuevas modificaciones, hicimos la solicitud de una patente europea. Actualmente hemos hecho la extensión internacional.
¿Cómo empezaste a implicarte en la creación y validación de una tecnología como la que se ofrece desde Hydrokemós?
Después de diez años de formación en la industria externa, me integré en Dr. Canicio Consulting Chemist, en el año 2008 como Dir.ª de Desarrollo e I+D. La compañía ya trabajaba con nitratos desde el año 2004, los primeros años se habían realizado estudios y pruebas experimentales pero sin utilizar tecnologías electroquímicas que desarrollamos entre 2008 y 2013. De ello surgió la creación de Hydrokemós.
¿Cómo describirías el proceso que habéis vivido para llegar a la situación en la que os encontráis actualmente?
Las personas que forman parte de Dr. Canicio Consulting y por extensión el equipo de Hydrokemós, somos más tecnólogos que científicos. Necesitamos hacer, además de saber, y precisamos superar con éxito retos de forma continua para poder continuar con nuestra actividad. De cada experiencia, sobre todo de los malos resultados, extraes una conclusión positiva que puede ayudarte en un futuro.
En este momento estamos muy satisfechos porque después de muchos años llevando a cabo pruebas en laboratorios y desarrollando la tecnología, cosechamos resultados y te das cuenta que los objetivos se han conseguido y superado. Dr. Canicio Consulting Chemist ha jugado un papel esencial para que esto fuera posible no solo asesorando el desarrollo tecnológico sino también apoyando moral y económicamente el proyecto en momentos verdaderamente difíciles, muy diferentes de los que ahora vivimos con éxito y financiación
¿Cuándo creasteis vuestro primer prototipo?
El primer prototipo de un metro cúbico día se creó en el año 2014 y se puso en funcionamiento en IQS. Un año más tarde instalamos el HYK40, el prototipo de cinco metros cúbicos día en Borrassà y este mes de septiembre ubicaremos la primera planta alimentaria de 20 m3/día en Malla (Osona). En diciembre instalaremos la planta de remediación de eliminación de 12 kg/día de nitrato procedente de aguas residuales de la industria metalúrgica y en abril de 2017, pondremos la planta industrial de potabilización de 100 m3/día en Borrassà.
En 2017, además, una planta de remediación medioambiental. En un intervalo de tiempo muy reducido tendremos cuatro plantas industriales en funcionamiento y esto es un paso muy importante para acreditar la electrodesnitrificación de Hydrokemós como la mejor tecnología disponible (MTD) para la eliminación de nitratos de agua para potabilización y remediación ambiental.
¿Cuáles son los siguientes pasos que realizaréis para implementar la tecnología de Hydrokemós en el mercado?
Como tecnólogos, nuestra vocación es más crear que administrar, y por este motivo, creemos que es importante conseguir un socio industrial para poder implementar Hydrokemós en el mercado. Creemos que con él podremos establecer una red comercial mundial capaz de acreditar la electrodesnitrificación de Hydrokemós como la mejor tecnología disponible (MTD) para la eliminación de nitratos.
Durante los siguientes meses tenemos que seguir demostrando que la tecnología funciona en campo a nivel industrial y validar costes, resultados y calidad. En este sentido antes de finales del año 2018 nos gustaría encontrar un socio industrial para acelerar esta expansión al mercado.
¿Cuál es el día a día de un CEO de una startup como la vuestra?
Somos una microempresa y como CEO es necesario que trabaje en distintos ámbitos de la compañía. Por este motivo, en este momento estoy involucrada fundamentalmente en los temas de fabricación y estrategia empresarial. Además, mi día a día actual también se centra en tener actualizada la información respecto al progreso de todos los programas a los que aplicamos, preparando y enviando informes técnicos muy exhaustivos a la Comisión.
Afortunadamente nuestra administradora, Mercè Campàs, controla finanzas y gastos. El Dr. Canicio está muy involucrado en todos los temas técnicos. Contamos además con un excelente equipo humano para el desarrollo de las pruebas en el laboratorio, diseño y fabricación de las plantas de electrodesnitrificación, automatización y seguimiento de las plantas.
¿Cuáles han sido las dificultades con las que os habéis encontrado para sacar adelante vuestra ecotecnología?
Principalmente de financiación. Hasta la concesión del proyecto europeo, los tiempos fueron muy complicados. Tuvimos que mantenernos con recursos propios, poniendo en juego el patrimonio de la empresa madre y el personal. Ya en 2014 tuvimos el apoyo de crédito ENISA y de la concesión de un programa RETOS del Ministerio al que renunciamos por ser incompatible con el programa H2020 de la Comisión. Tampoco ha sido sencillo poder encontrar ubicaciones para probar la tecnología, sobre todo cuando estaba en su fase inicial. A medida que Hydrokemós ha ido evolucionando, la situación ha cambiado.
¿Cuál crees que es la situación del sector cleantech y qué futuro le auguras?
En los últimos tiempos ha habido un boom de las tecnologías TIC, pero creo que, sobre todo a nivel mundial, las tecnologías relacionadas con la energía y el agua son fundamentales para el futuro de la población.
Yo auguro un buen futuro al sector cleantech, la población está creciendo y se debe poder abastecer de agua potable a todas las poblaciones aprovechando los recursos propios. Hay que tener en cuenta que solo el 0,3 % del agua dulce que existe proviene de los ríos y de la zona superficial, un 29,70% de aguas subálveas y un 70% de glaciares. Por lo tanto, gran parte del agua está en el subsuelo y este está contaminado por nitratos en la mayor parte de los países desarrollados donde se practica agricultura y ganadería intensiva para alimentar la población. Es necesario reequilibrar el ciclo del nitrógeno, por este motivo creo que dado el carácter único y disruptivo de nuestra tecnología el porvenir es esperanzador.
Hace un año el IQS decidió apostar por la creación de un centro de emprendimiento, el IQS Tech Factory, ¿qué crees que puede aportar a los estudiantes y emprendedores?
Creo que pueden aportar muchos conocimientos y ser muy útiles para todos los proyectos que están creciendo y quieren llegar algún día al mercado. Las spin-offs hemos ido avanzando pero no teníamos ningún lugar ni ninguna figura que nos pudiese representar y ayudar en el desarrollo de negocios y la financiación.
¿Qué consejo darías a todos emprendedores que trabajan por sacar adelante su proyecto?
Les aconsejaría que sobre todo tengan claro el tipo de negocio y producto que quieren llevar al mercado. Es preciso que la idea se integre en la economía productiva, que quiere decir, resolver mejor un problema existente que pueda ser base de un mercado.
Por otro lado, es fundamental tener un buen equipo humano, implicado en el proyecto y socios financieros solventes, moral y económicamente. Es fundamental no caer en la especulación financiera y asegurar el éxito del proyecto.
Si miras hacia el futuro, ¿dónde te ves en cinco años?
Si miro al futuro, me veo posiblemente como consejera de Hydrokemós, integrada en una compañía multinacional, que sea capaz de acreditar la electrodesnitrificación mundialmente como la mejor tecnología disponible. Me encantaría poder ver en 5 años que Hydrokemós cuenta con muchas plantas de electrodesnitrificación en el mercado.
También me veo como administradora, directora técnica y accionista de Dr. Canicio Consulting Chemist y como tecnóloga espero seguir trabajando en nuevos aspectos de la electrodesnitrificación o en alguno de los numerosos proyectos que Dr. Canicio Consulting madura a la espera de financiación.